El cantante español Alejandro Sanz, ofreció el primero de tres conciertos sold out en el Auditorio Telmex en Guadalajara.

Portando un traje color mostaza que combinaba con su cabello rubio, el cantautor llegó con su tour «Sanz en vivo» ante aproximadamente 9,000 tapatíos.

Tras 15 minutos de demora, inició el concierto acompañado de un juego de luces, visuales y una gran banda compuesta por 10 músicos, donde destacó la ejecución de mujeres en la batería, bajo, piano y coros.

Sanz se mostró muy contento de regresar a Guadalajara tras su última presentación que fue en el 2019 en el Estadio 3 de marzo.

«No es lo mismo» fue la canción elegida para arrancar el tan esperado show.

«Qué alegría estar aquí, muchos años sin volver, es una tierra bendita, solo no les perdono algo: le robaron el corazón a mi hija», comentó Sanz entre risas, para proceder a dedicarle un tema a su hija Manuela que se encontraba entre el público.

Comenzaron los éxitos como «Regálame la silla» y «Alma al aire», mismos que fueron coreados con gran nostalgia por los asistentes.

En «La fuerza del corazón», algunas fans iluminaron corazones hechos de celofán, que entregaron previamente afuera del auditorio.

Las sorpresas seguían, y en el tema «Desde cuando», Sanz contó con un invitado especial: el cantante de regional Christian Nodal apareció en escena y se mostró muy contento de colaborar con el español. «Sueño cumplido», posteó posteriormente en sus redes sociales.

El clímax de la noche llegó con «Corazón partío», además de «Contigo», un tributo a Joaquín Sabina. Sanz interactuó todo el tiempo con los fans de la primera fila, saludándolos de mano e incluso prestándoles su guitarra.

El español terminó el show con un medley de «Mi soledad y yo», «Y si fuera ella» y «Ese último momento», despidiéndose con el público de pie y gritos de «Te amo Alejandro«.

Sanz ofrecerá dos fechas más los próximos 3 y 4 de marzo.